domingo, 29 de noviembre de 2015

Comunicación Asertiva Mamá - Papá y Ginecobstetra


COMUNICACIÓN ASERTIVA    MAMÁ – PAPÁ y GINECOBSTETRA

Por siglos el nacimiento del los seres humanos se dio en su lugar de vivienda o cerca de ella; generalmente asistida por alguna mujer de la familia o por alguna mujer de su entorno con experiencia para atenderla, llamadas matronas o parteras.
El nacimiento en instituciones de salud es relativamente reciente; no más de setenta años; es probable que muchas mamás y la mayor parte de las abuelas de las embarazadas que están leyendo este artículo, hayan nacido en sus casas.

En la llamada institucionalización del nacimiento y la aparición formal de la especialidad de la ginecología y obstetricia hubo una transformación de cómo naceríamos; empezando por que los partos serían atendidos por los obstetras, entonces siendo mayoría varones.

Sin duda, hubo una reducción sumamente importante en las complicaciones y muertes tanto de las mamás como de los bebés; esto gracias al advenimiento de mayores conocimientos, el control prenatal, nuevos medicamentos, posibilidades de transfusión sanguínea, antibióticos, equipos de diagnóstico como el ultrasonido y los monitores cardiotocográficos, importantes avances en anestesiología así como la posibilidad de hacer con alta seguridad el nacimiento mediante la cesárea.
La obstetricia actual,  ha tomado un enfoque muy importante al ver en el embarazo el cuidado dos individuos; Madre y Bebé.

Actualmente también existe un mayor deseo de conocimiento, capacidad de decisión, actitud proactiva y preparación de ambos padres, así como participación paterna ante el proceso del embarazo y parto.

Los tiempos en que en el proceso del cuidado de madre e hijo era el médico quien tomaba todas la decisiones y estas no eran cuestionables; terminó hace muchos años.

Ahora nuestra comunicación debe ser asertiva, lo que significa  abierta, clara, sincera, en el marco del mutuo respeto y la confianza.

Los Médicos tendremos principios básicos:
-       La mujer es la protagonista durante el nacimiento.
-       Es fundamental respetar los procesos naturales y las decisiones de ambos padres.
-       Utilizar medicamentos, monitoreo e intervenciones cuando estén validadas y con indicación precisa que redunde en la salud del binomio Madre – Bebé; y  que previamente hay sido entendida y consentida por la Madre.
-       En la atención integral se involucra después del nacimiento entre otros aspectos, apego inmediato, alojamiento conjunto y la lactancia materna.
-       Se reconoce la autonomía de decisión de cada mujer embarazada pero debe quedar claro que en quienes han puesto su confianza son expertos en la obstetricia.
-       Existen protocolos de seguridad clínica y el hecho de no seguirlos implica posibles complicaciones. Todo embarazo conlleva riesgos biológicos inherentes al proceso de reproducción.

Es preciso reflexionar que en Medicina no todo es biología, fisiología, tecnología, modernidad y novedad, sino que es imprescindible considerar sus raíces humanitarias, muy especialmente en el proceso del nacimiento en donde el personal de salud juega un papel fundamental ya que facilita y promueve la facultad de la mujer para el ejercicio de sus derechos sexuales y reproductivos.


La llegada de un humano es un hecho único e irrepetible y es responsabilidad de todos el que se de en las mejores condiciones.


Dr. Paulo Meade Treviño
Ginecologo y Obstetra
Miembro del Comité de Actividades Científicas
Federeación Mexicana de Colegios de Obtetricia y Ginecología


miércoles, 18 de noviembre de 2015

EMBARAZO Y VACUNACION contra INFLUENZA

La Recomendación es clara
Las Mujeres embarazadas SI deben vacunarse contra Influenza Estacional

martes, 17 de noviembre de 2015

INFLUENZA Y EMBARAZO

INFLUENZA Y EMBARAZO DR. PAULO MEADE TREVIÑO Miembro de Comité de Actividades Científicas  Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia y Ginecología http://www.ginecologiasanluispotosi.blogspot.com/ ➢ Las mujeres embarazadas aunque no se contagian más que otras personas de Influenza Estacional, pueden desarrollar complicaciones más severas como neumonía o problemas respiratorios muy graves. ➢ Pueden requerir con mayor frecuencia de hospitalización, tienen incremento de la mortalidad materna, partos prematuros o abortos. ➢ Estas razones motivan a que la Sociedad Potosina de Ginecología y Obstetricia habiendo revisado la información científica más actual, emitan esta Guía de Recomendaciones de Prevención y Manejo de Influenza en Mujeres Embarazadas, con la finalidad de evitar las complicaciones maternas y perinatales relacionadas. ➢ Por lo anterior, además de las recomendaciones generales deben incluirse algunas específicas durante el Embarazo y la Lactancia: • Las mujeres embarazadas no deben ser cuidadoras de familiares o pacientes con influenza. • Las vacunas contra la influenza Estacional son seguras durante el embarazo y su aplicación puede y debe hacerse en cualquier etapa de la gestación. • La aplicación de la vacuna contra la influenza Estacional del año previo no provee protección contra la influenza del siguiente año. • También, las mujeres en período de lactancia deben aplicarse ambas vacunas, lo cual puede ayudar a proteger a su recién nacido. • Los efectos colaterales potenciales de la vacuna contra la influenza estacional, es el más frecuente el dolor en el sitio de aplicación. Otros menos frecuentes son fiebre leve, malestar general y fatiga por unos días. • Es importante recordar que la vacunación no provoca la enfermedad; lo que estimula es una reacción inmune para que el cuerpo produzca células de defensa específicas para que no se presente la enfermedad al estar la persona en contacto con el virus. • Está claramente demostrado que la vacuna contra la Influenza Estacional NO provoca alguna alteración en los embriones o fetos. • Las mujeres embarazadas con un cuadro clínico sospechoso de influenza, caracterizado por fiebre superior de 38oC, tos, dolor de garganta y que puede acompañarse de dolor de cabeza, de músculos y/ó articulaciones, deben acudir INMEDIATAMENTE Y SIN AUTOMEDICARSE a la unidad médica más cercana ó ponerse en contacto con su GinecoObstetra. • Ante el presuntivo diagnóstico clínico de Influenza se prescribirá el tratamiento antiviral sin necesidad de realizar pruebas diagnósticas virales confirmatorias. • Está bien demostrado que el tratamiento antiviral que se utiliza para la Influenza no provoca daños al bebé. • Todas las embarazadas bajo tratamiento antiviral deben recibir una vigilancia estrecha para supervisar la evolución de la enfermedad y el apego al tratamiento. • El tratamiento antiviral no es una contraindicación para la lactancia materna. • Todos los casos de Embarazada con Influenza en los que se haya registrado el agravamiento súbito; fiebre persistente, dificultad para respirar, tos persistente, flemas con sangre, vómito severo, confusión mental, descompensación, somnolencia; o si padecen asma, diabetes, obesidad mórbida, enfermedades del corazón, pulmonares ó inmunológicas; deben ser hospitalizados por el alto riesgo de complicaciones serias, y con aislamiento adecuado debido a la alta contagiosidad de la Influenza. ES PRIORIDAD TOMAR LAS MEDIDAS NECESARIAS POR TODOS LOS MEDICOS Y EN TODAS LAS UNIDADES MÉDICAS DEL PAÍS PARA GARANTIZAR QUE LAS MUJERES EMBARAZADAS SEAN VACUNADAS Y AQUELLAS CON INFLUENZA NO SE COMPLIQUEN Y SE EVITEN TANTO LAS ALTERACIONES GESTACIONALES COMO LA MORTALIDAD MATERNA POR ESTA CAUSA. Nota: Ninguna de estas recomendaciones se contrapone a las ya emitidas por la Secretaría de Salud; incluso, son la base para la elaboración de este documento.